#4 Tiempos
El buen nombre de Mira Nair | Columna de Jorge Ramírez Pardo
ENRED@RTE
La India realiza la máxima producción fílmica anual, superior a la estadounidense.
En el caso de las sobre/ofertadas películas de Hollywood, consabido es, son películas en cantidad, oficiosas en tanto forjadas con herramientas industriales y con propósito comercial prioritario de ser un negocio de consumo a gran escala; la mayoría plagadas de lugares comunes y clichés que garanticen su comprensión a un público acrítico y desinformado; por contra, carentes de singularidad creativa y complejidad argumental verosímil. Las hay con calidad multimodal por excepción; realizadas con frecuencia por directores de origen extranjero. Los mexicanos, por orden de aparición, Luis Mandoki, Alfonso Cuarón, Guillermo Del Toro y González Iñárritu, entre ellos. Ahí también se desarrollaron y brillaron con denuedo, Charles Chaplin, británico; Fritz Lang estuvo, pero ya había dejado sus mejores aportes en Alemania (Metrópolis por sobre todo); Elia Kazan, armenio; Román Polanski, nacido polaco y Milos Forman, checoslovaco, por mencionar algunos destacados.
En el cine industrial estadounidense también estuvieron de paso precursores del cine sonoro mexicano como Fernando de Fuentes, Emilio “el Indio” Fernández y el cine/fotógrafo Gabriel Figueroa. De paso también, directores de otras extranjerías: Michelangelo Antonioni, de la vigorosa corriente neorrealista italiana, varios representantes del Free cinema inglés, el nuevocinealemanista Win Wenders y, más recientemente, la hindú Mira Nair, ahora residente en Sudáfrica.
Pese al volumen de cine indio, récord mundial de producción, a causa del monopolio de distribución que Hollywood, hasta hoy, impone al hemisferio occidental, es casi imperceptible en las pantallas grandes mexicanas en cine de la India. Por excepción y gracias a las Muestras internacionales de cine que organiza cada año la Cineteca nacional, se proyectan en circuitos no comerciales y cineclubes universitarios la obra fílmica más destacada de Mira Nair.
Nair, con notable conocimiento de la multiculturalidad de su país y los parámetros culturales básicos del hemisferio occidente y el American way of life estadounidense, realizó en su país obras fílmicas con maestría. Salaam Bombay (1988, con equivalencias a Los olvidados, de Luis Buñuel, filmada en México) y Boda monsónica (2001), proyección de una ritualidad excelsa.
NAIR EN AULAS POTOSINAS
La película “El buen nombre” (2006) de la citada Mira Nair, fue exhibida y analizada el viernes pasado al interior del Cineclub de Centro Universitario de las Artes (CUART-UASLP), dentro del ciclo El fenómeno migración en la mirada del cine. Estas fueron algunas de las reflexiones de los participantes cuya base argumental es la migración de una pareja joven Ashoke (Irrfan Khan), estudiante de posgrado en ingeniería de fibra óptica, y Ashima (Tabú), a la postre bibilotecaria, dejan la ciudad de Calcuta en la India para ir a Nueva York en los Estados Unidos. Buscan mejorar su condición económica y ampliar su horizonte cultural. En NY tienen dos hijos, Gogol/Nicki (Kal Penn) y Sonia (Sahira Nair):
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• Paola, estudiante de medicina, y quien expuso el subtema Migraciones de Europa y Asia a Estados Unidos en el cine, presentó la película y aportó datos como los siguientes:
>India tiene una población de 950 millones de personas junto con China, alrededor de un tercio de la población mundial.
>Cerca del 50% de indios se encuentra en India y 50% viven en el resto del mundo provocando la diáspora india.
>De entre la multiculturalidad proyectada en la película, los referentes indios son bengalíes.
• La película muestra un proceso de plena bi-culturalidad en los personajes adultos y en sus hijos de ascensión gradual que inicia con un relativo rechazo al ascendente hindú. Es fundamental un viaje al Taj Majal, inspiración para Gogol , quien descubre su vocación por la arquitectura.
• La película tiene un ritmo armónico, logrado con conjuga frecuentes giros argumentales que muestran en paralelos sucesos de pequeño núcleo familiar en Estados Unidos y el suceder en la vida de sus ancestros en La India. En ello hay pulcritud en referentes culturales hindúes y pautas musicales ancestrales indias y contemporáneas universales.
• Hay notables equivalencias culturales entre la multiculturalidad hindú y la mexicana. También junto a las mutuas grandezas culturales, la pobreza y marginalidad actual en grandes núcleos poblacionales de ambas naciones.
• El hecho de que sea la película realizada desde una mirada femenina, la de Mira Nair, permite ver a los personajes femeninos particularmente a Ashima esposa/mamá y quien representa a su nuera Zuleikha (Moushumi Mazumdar), permite ver un desdoblamiento asombroso/constructivo de estos personajes; no solo muestran fortaleza y capacidad de asimilar su condición bicultural, en el caso de Zuleikha, con su conducta interrogación el binomio fidelidad/lealtad en la pareja.
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• Gogol/Nicki, por su parte, tarda en asimilar la herencia cultural hindú de sus padres. Su primer viaje a la india y la repentina muerte de su padre le motivan a revalorar su herencia biológica/cultural. En cambio, en un suceso que el filme deja con final argumental abierto, no entiende la etapa amorosa de su esposa Zuleikha durante sus estudios en París, previo a su matrimonio, y sus resonancias en el tiempo presente de la historia.
LA PELÍCULA DE PUEBLO QUIETO/MUSTIO ES OBSCENA
Mientras un núcleo selecto de universitarios participa en un ejercicio pleno de cineclub:
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• Un secretario de Cultura potosino, Armando Herrera pan/priísta, desentona instalado en el engaño, la mentira, el sobresueldo para él y su equipo humano, sumador de incompetencias, la mayoría creativos en retiro. No satisfecho, todavía indujo la modificación de los estatutos en el Centro de las Artes para imponer en su dirección al pri/panista Eudoro Fonseca, fundador de la dictadura grupal que mal/comanda el sector oficial de cultura. Ambos creativos en retiro, ambos nepotes o sobrinos de exgobernadores, y sin visos de cumplir el anhelo de la comunidad artística potosina: que renuncien y den paso al relevo generacional.
• Un gobernante, Juan Manuel, borroso; la criminalidad y feminicidios ya le llegan a los aparejos.
• Un presidente municipal, Xavier Nava, de acendrado como imborrable origen Gallardo, acomodaticio a cualquier marca política, es también sobrino político de exgobernador con alientos del desvencijado priísmo local. Munícipe siempre en campaña política egolátrica torpe. A ver si le resulte efectivo, y le vaya a “despertar San Luis” y advierta de su incompetencia aspiracional.
#4 Tiempos
Selección Femenil Sub-17 el despertar desde Marruecos | Columna de Arturo Mena “Nefrox”
TESTEANDO
En Marruecos se está escribiendo una historia que podría marcar el rumbo del fútbol femenil mexicano. La Selección Sub-17 llegó al Mundial con la ilusión intacta, pero también con el peso de representar a un país que exige crecimiento, identidad y resultados. No es solo una competencia juvenil, es la oportunidad de demostrar que el talento mexicano está listo para dar el salto.
El torneo comenzó con un tropiezo doloroso ante Corea del Norte. Fue un golpe que dejó lecciones más que heridas. Pero lo más importante no fue la derrota, sino la reacción. En el siguiente encuentro, frente a Países Bajos, México mostró carácter, temple y una madurez poco común para su edad. Ese triunfo ajustado cambió por completo la atmósfera del grupo y reavivó la confianza.
Con el paso de los partidos, la selección se reencontró con su mejor versión: ordenada en defensa, solidaria en el medio campo y valiente al frente. Las jugadoras comenzaron a jugar con una convicción distinta, sabiendo que el esfuerzo colectivo podía llevarlas lejos. Esa confianza las ha impulsado hasta los cuartos de final, donde ahora deberán enfrentar a Italia, un rival con tradición, técnica y ambición.
El duelo ante las italianas será una prueba de madurez. México llega con un grupo que no teme a los nombres ni a los antecedentes. Lo que se ha visto hasta ahora es un equipo que juega con personalidad, que corre cada b alón como si fuera el último
y que entiende que representar al país en una Copa del Mundo es un privilegio que se honra con entrega total.Más allá de los resultados, este torneo está dejando señales alentadoras. La evolución táctica, la inteligencia en la recuperación y la capacidad para sostener el ritmo de juego muestran que el proceso del fútbol femenil en México empieza a consolidarse. Ya no se trata de promesas, se trata de hechos.
Estas jóvenes futbolistas no compiten solo contra rivales extranjeros, sino también contra una historia que durante años les negó visibilidad. Hoy, ellas están cambiando la narrativa. Cada pase, cada jugada y cada gol son una afirmación de que el fútbol femenil mexicano está listo para ocupar su lugar en la élite.
La Selección Mexicana Femenil Sub-17 está viviendo un momento clave. Enfrentar a Italia en los cuartos de finalno es solo una cita deportiva, es la oportunidad de confirmar que México tiene una generación capaz de mirar de frente a cualquier potencia. Pase lo que pase, este equipo ya dejó claro que el futuro del fútbol femenil nacional no es una promesa: es una realidad que acaba de comenzar.
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#4 Tiempos
Agua, territorio y sociedad, el tema del mes de La Ciencia en el Bar | Columna de J.R. Martínez/Dr. Flash
EL CRONOPIO
Continúa el ciclo número cuarenta de La Ciencia en el Bar, que está por cumplir cuarenta años de actividades siendo el programa de este tipo, pionero en nuestro país y que fue establecido para festejar los cincuenta años de la Física en San Luis que ahora llegará a los setenta.
En este ciclo conmemorativo toca el turno a la Dra. Azalea Judith Ortiz Rodríguez que abordará el tema, Agua, Territorio y Sociedad: construyendo puentes entre la ciencia y la gente a través de la conectividad; tema por demás interesante e importante pues aborda el problema del agua, sustancia vital para la vida y el desarrollo de nuestras sociedades.
En anteriores sesiones de La Ciencia en el Bar, se ha tratado este tema y ahora la Dra. Ortiz nos presentará nuevos aportes a esta problemática donde la participación ciudadana es de vital importancia en esa liga con los especialistas a fin de resolver los grandes problemas sociales asociados a el agua, incluyendo los aspectos territoriales. La sesión de hace diez años que consistió en una mesa redonda con el tema de agua, leyes y derechos, puede consultarse en mi canal de youtube:
La charla se llevará a cabo este miércoles 29 de octubre en punto de las ocho de la noche en la Cervecería San Luis, ubicada en Calzada de Guadalupe número 326, la entrada es gratuita y no hay obligación de consumo; es un escenario informal de convivencia entre el gran público y la comunidad científica potosina que aporta y pone a discusión sus resultados científicos en aras de formar mejores sociedades.
La formación de la Dra. Azalea Judith Ortiz Rodríguez ha sido muy variada, realizó una licenciatura en Geografía titulándose en 2010, posteriormente la maestría en ciencias en Geología Aplicada (2012) y, finalmente su doctorado en el programa institucional de la UASLP en ingeniería y ciencias de materiales graduándose en 2017.
Tuvo una estancia posdoctoral en el Instituto de Investigación en Zonas Desérticas de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí de 2020 a 2024, donde se enfocó en cuestiones de la conectividad hidrológica en varios contextos ambientales, publicando sus resultados en revistas especializadas en cuestiones hídricas. El tema del que nos hablará es justamente lo que trabajó en el Instituto de Zonas Desérticas bajo la dirección del Dr. Carlos Alfonso Muñoz Robles.Ha colaborado en la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México y en el campus Juriquilla en Querétaro de la misma universidad. Es una joven científica formada en los programas universitarios de la UASLP y formada como investigadora en el programa de Ingeniería y Ciencias de Materiales que es uno de los más importantes programas de formación científica de la UASLP que reúne a un buen número de dependencias universitarias dedicadas a la investigación científica y donde participan grupos de investigación en diversas áreas del conocimiento. En este programa que está cumpliendo veinte años, han egresado más de doscientos investigadores con el grado de doctor, entre los que se encuentra la Dra. Azalea Judith Ortiz Rodríguez.
Los invitamos este miércoles 29 de octubre en la Cervecería San Luis a escuchar la charla sobre agua en el tema de conectividad hídrica, que nos presentará la Dra. Judith Ortiz.
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#4 Tiempos
La seriedad y la risa | Columna de Juan Jesús Priego Rivera
LETRAS minúsculas
Un amigo mío, ejecutivo de cierta importancia, tan pronto como llega a su oficina arquea las cejas, se compone la corbata y adopta una pose tan autoritaria que a uno le dan ganas de obedecerle en todo. ¡Dios mío, qué transmutación de un minuto a otro y de una puerta a la siguiente! ¡Pero si apenas hace cinco minutos venía en su auto contando chistes rojos! Cuando se apeó del automóvil aún sonreía, pero apenas entró en el edificio adoptó un tono tan cadavérico y malhumorado que ya sólo verlo daba miedo. ¿Estoy ante uno de esos que los psicólogos llaman ciclotímicos?, me preguntaba yo lleno de asombro, pues no me explicaba cómo se podía pasar de un estado de ánimo a su contrario de manera tan radical y, sobre todo, en tan corto tiempo.
-Señorita –dijo mi amigo apretando un botón y levantando una bocina-, ayer por la tarde le pedí que revisara el expediente X. ¿Lo hizo usted?
La señorita tartamudeaba en la lejanía, presa de un pánico feroz.
-Sí, sí, lo he hecho. ¿Quiere usted revisarlo, licenciado?
Yo miraba a mi amigo como preguntándole: «¿Eres tú? ¿De veras eres tú?». Pero él hizo como que no entendió mi pregunta, y en eso la secretaria anunció la llegada del famoso y temido expediente X.
Entonces recordé lo que, según dicen, aconsejó una vez Anaximandro el filósofo a Pericles el político: «Acuérdate de lo que te digo: para seguir en el poder hay que ser serios». Y sonreí con cierta malicia, como entendiendo por fin de qué iba la cosa. Pero, ¿había leído mi amigo a los filósofos griegos?
Lo dudo. Ya el Memín Pinguín hubiera sido demasiado para él. Y esto lo digo no en plan de mofa, sino ateniéndome a lo que él mismo me dijo un día, a saber: que el único libro que había leído en su vida, y de eso hacía ya muchos años, era el instructivo de una cámara Nikon que acababa de comprar en aquel entonces; pero, de ahí en fuera, nada más…
–Es apasionante leer los instructivos y a la vez muy divertido –me dijo aquella vez-. Pero, ¿quién lee ya estas obras maestras de la concisión? ¡Es la literatura más olvidada de todas! No miento si te digo que mi modesta biblioteca personal, si puedo llamarla así, está formada sólo por esos instructivos o manuales de uso que la gente desecha con desconsiderada facilidad. ¡Tengo más de cien! Algún día leeré los noventa y nueve que me faltan.
¿Bromeaba mi amigo diciéndome estas cosas? Pero no, no bromeaba: recordemos que estaba en su oficina y que él, allí, no se habría permitido ni la sonrisa más discreta.
Pero ahora hablemos de una mujer a la que conozco. En su juventud fue algo hermosa, según pude verlo en viejas fotografías conservadas con devoción por ella misma en un álbum que, de tan pesado, nadie aceptaría cargar durante cinco minutos seguidos. Sí, digamos que fue bella. Pero cometió en su juventud el error de hacer caso a una amiga suya del colegio que le dijo un día:
-No permitas que tu hermosura se estropee. Evita, sobre todo, las patas de gallo.
-¿Y cómo las he de evitar? –preguntó ella, pues realmente le quitaban el sueño todas estas cosas.
-No rías. Y, si puedes, evita también las sonrisas. ¡Estropean el rostro como no tienes una idea! Lo arrugan, lo ajan, lo deforman.
¡Lo mismo pensaba aquel monje amargado de El nombre de la rosa!: «La risa sacude el cuerpo, deforma los rasgos de la cara y hace que el hombre parezca un mono».
Desde entonces aquella mujer ya nunca rió, conformándose, para manifestar su alegría, con estirar la boca y hacer una mueca, cual si estuviera ante un espejo comprobando que no se le ha quedado nada entre los dientes después de haber comido. ¿Sonreír de veras? No, gracias. Debo cuidarme de las patas de gallo.
Y así podría contra infinidad de historias más; baste por el momento con decir que, si bien la sonrisa tiene enemigos, yo preferiría mil veces que nadie me obedeciera y todo se me arrugara, a andar por la vida mostrando una horripilante cara de tabla.
Escribió el padre Auguste Valensin en su diario (anotación del 10 de mayo de 1937): «No sentir miedo de Jesús, no sentir miedo de mi Padre. Me imagino a Jesús con sus apóstoles. Llega a la orilla del lago donde los niños juegan. Y, al verlo, huyen los niños. Una madre le trae a su niñito de seis años y el pequeñín, aterrorizado, se agarra a las faldas de su madre, grita, quiere escaparse de allí. ¡Lo contrario de lo que sabemos que ocurría! Y me pregunto: ¿qué sentimientos hubiera experimentado Jesús? ¡Es tan doloroso darse cuenta de que se infunde miedo! Y todavía el miedo de un niño no puede realmente entristecernos porque es irrazonado, pero Jesús, que vino por amar a los hombres y fue todo amor para ellos, si hubiera visto a los que se acercaban a Él y a quienes ofrecía su afecto retirarse muertos de miedo; si hubiera visto a sus apóstoles tratarle como un maestro severo, mientras que Él se mostraba para con ellos indulgente y suave; si hubiera visto que los pecadores evitaban incluso por respeto su presencia, ¡qué pena hubiera experimentado!».
Jesús debió sonreír, y muy a menudo; debió ser incluso un maestro en el arte de la sonrisa, pues de no haber sido así, ¿por qué iban los niños a correr a abrazarlo espontáneamente, como sabemos que lo hacían? Somos más bien nosotros, sus discípulos, quienes hemos caído a veces en la tentación de la seriedad. ¡Como si por parecer serios nuestros enemigos fueran a respetarnos más! Quizá sea demasiado injusto al decir esto, pero un cristiano que infunde miedo –sea cual fuere su trabajo en la viña del Señor-, aún no ha podido ser cristiano más que a medias.
¿O me equivoco, estimado lector?
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