#4 Tiempos
Las pasiones de unos y otros | Columna de Óscar Esquivel
Desafinando
Las grandes pasiones, solo ellas pueden y serán siempre un elemento que transforma en positivo al hombre, engrandece el alma y mantiene viva su esperanza. “Las pasiones se tornan malas y pérfidas cuando se consideran de un modo malo” Nietzsche. Existen pasiones que tornan de alguna manera a la necedad, incluso al hombre de amplia cultura, preparado en la academia, en ocasiones es lo contrario al ser humano cuerdo y sabio, cuando le falta la pasión de vivir y se ve envuelto en un solo sentido que es, su propia existencia.
Apasionadamente se experimenta la emoción de sentir el correr la sangre por las venas, todo por un objetivo: el glorificar para la historia los actos consumados, sin dar tregua para la reflexión, donde el exceso de pasión es una recta opuesta a la razón natural de las cosas.
Vemos con desgano desinteresado, aburrido, sumidos en la mediocridad de criterios, cómo la clase política del mundo en general, habla de sus sueños y anhelos para llevar a buen puerto sus ideales, de esta manera servir a su pueblo amado, no son ocurrencias es la verdad del origen de la demagogia. La demagogia no son sino palabras envueltas de pasión en piel de lobo, discursos llenos de nacionalismo, de esperanza, de arraigo, para llevar a la gente a un sitio donde desea estar feliz, sin embargo todo frenesí contagiado se vuelve en aburrimiento, desesperanza, odio.
Semanas pasan, con sus días, horas, segundos y la fiebre de muerte, dolor, sufrimiento no disminuye, somos un país enfermo, dos Méxicos polarizados. Unos llamando la cordura al presidente, otros apasionados por él, unos añorando el pasado de privilegios de derroche, vitoreando a sus héroes como Fox y Calderón, hasta Peña dicen que lo extrañan, otros, bendiciendo sus entradas monetarias “extras” para comprar un IPhone obteniendo becas de 3600 pesos para “prepararse para el trabajo digno” y cuando los empresarios chicos y grandes los necesitan, ni los encuentran, dinero para sus “chuchulucos”, mientras quienes trabajan de verdad, médicos, campesinos, amas de casa sufriendo son portadores del signo de Caín, están marcados por el trabajo y por ello no son dignos de apoyo real.
Cuatro mujeres desaparecen de la faz de la tierra al día, conteo oficial por supuesto, más si sumamos aquellas que en su tránsito por el país se esfuman y nada se sabe.
El fiscal potosino fue regañado y exhibido en su comparecencia ante la diputación local, con furia se dijo humillado, agraviado por un diputado al cuestionarle sobre su actuar, pareciera que el fiscal ya iba preparado al dar lectura a artículos sobre códigos de ética de congreso, ha de saber el señor procurador que no es un diálogo de amigos, es un comparecencia, donde se le cuestionan los avances, aciertos y fallas de la procuración de justicia en San Luis Potosí. Si bien, el diputado sí se mostró altanero, el fiscal está obligado a responder todas y cada una de las preguntas que le hacen los “representantes del pueblo”, y no salir por la más fácil, “no se han aprobado leyes, ni contribuido a la procuración de justicia de parte del Congreso del Estado” ¡¿y!? ¿No se supone que el fiscal debe, como titular, de enviar a los diputados propuestas de iniciativas? Hay 27 diputados a su disposición, con sueldos onerosos, vergonzantes, hirientes, para una sociedad empobrecida, casi medio millón de pesos, se embolsaran sin desquitarlo, aun con sus excepciones.
Señor Fiscal del estado: podrá estar de sentimiento por el agravio a su persona, coraje, enojo que seguramente se le pasara, como todo en el gobierno del estado les entra por un oído y les sale por el otro; pero que son lentos, incapaces de frenar la delincuencia, ¡sí lo son!, tomen pasiflora, para los nervios, al fin y al cabo, los ciudadanos seguimos esperando respuesta ciertas y no pasiones burocráticas.
El apasionamiento del amor, de pareja, madres a hijos, de amigos o a la sociedad misma, se fractura cuando un miembro o varios desvían el rumbo, son variadas las protestas en contra de la violencia hacia las mujeres, como el performance chileno, denominado “un violador en tu camino” sin duda una protesta singular, con mucho sentimiento y pasión , reproducida en casi todo el mundo, son las plazas donde la voces de las mujeres se dejó sentir en contra de los violadores y acosadores, bien por ello, se les agradece el mensaje. No obstante, hablando de mujeres, nos encontramos con muchachas como Karen, de la Ciudad de México, ocasionando toda una movilización social en redes, llegando a ser vista por más de 2 millones de usuarios en tan solo unas horas. Karen de 27 años una mujer adulta, envía un mensaje aterrador a su madre después de abordar un taxi, al cual nunca subió, engañando a su mamá en primera instancia, “ mamí este señor se ve bien sospechoso y grosero”, cuando lo que realmente sucedía que la señorita, estaba cómodamente “chupando” unos tequilas con amigos.
Ella no llega a su casa por la noche, obviamente hizo sin “querer, queriendo” que la sociedad entera, se movilizara par encontrarla, las autoridades hicieron lo mismo. Karen sin más pudor apareció al día siguiente, sin vergüenza alguna, corriendo a su cuarto y dando un portazo, según relata su hermano.
Este caso y ante la situación tan compleja que vive el país, no podía quedar sin búsqueda, pero ella, Karen, es una mujer, pareciera un ser responsable, no lo es, como para reconocer lo que está bien o mal, con todas su agravantes.
Trabajo para los legisladores, debería legislarse sobre el tema, persona que engañe, invente secuestros, desaparición, violencia, como es el caso, debe ser castigada con todos los agravantes de mentir, no solo a su familia, si no a la autoridad, quien movilizo personal, patrullas, tiempo, impuestos que todos pagamos. En lo familiar ellos deberán arreglar sus diferencias o modos de vida, pero al hacer uso de una entidad del estado, realiza perjuicio al erario público.
Nada le costará a la señorita Karen, realizar trabajo comunitario, podría aplacar su cruda moral, trabajar con alegría, entusiasmo, al igual como lo hizo la noche del 4 de diciembre.
Nos saludamos pronto.
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#4 Tiempos
Agua, territorio y sociedad, el tema del mes de La Ciencia en el Bar | Columna de J.R. Martínez/Dr. Flash
EL CRONOPIO
Continúa el ciclo número cuarenta de La Ciencia en el Bar, que está por cumplir cuarenta años de actividades siendo el programa de este tipo, pionero en nuestro país y que fue establecido para festejar los cincuenta años de la Física en San Luis que ahora llegará a los setenta.
En este ciclo conmemorativo toca el turno a la Dra. Azalea Judith Ortiz Rodríguez que abordará el tema, Agua, Territorio y Sociedad: construyendo puentes entre la ciencia y la gente a través de la conectividad; tema por demás interesante e importante pues aborda el problema del agua, sustancia vital para la vida y el desarrollo de nuestras sociedades.
En anteriores sesiones de La Ciencia en el Bar, se ha tratado este tema y ahora la Dra. Ortiz nos presentará nuevos aportes a esta problemática donde la participación ciudadana es de vital importancia en esa liga con los especialistas a fin de resolver los grandes problemas sociales asociados a el agua, incluyendo los aspectos territoriales. La sesión de hace diez años que consistió en una mesa redonda con el tema de agua, leyes y derechos, puede consultarse en mi canal de youtube:
La charla se llevará a cabo este miércoles 29 de octubre en punto de las ocho de la noche en la Cervecería San Luis, ubicada en Calzada de Guadalupe número 326, la entrada es gratuita y no hay obligación de consumo; es un escenario informal de convivencia entre el gran público y la comunidad científica potosina que aporta y pone a discusión sus resultados científicos en aras de formar mejores sociedades.
La formación de la Dra. Azalea Judith Ortiz Rodríguez ha sido muy variada, realizó una licenciatura en Geografía titulándose en 2010, posteriormente la maestría en ciencias en Geología Aplicada (2012) y, finalmente su doctorado en el programa institucional de la UASLP en ingeniería y ciencias de materiales graduándose en 2017.
Tuvo una estancia posdoctoral en el Instituto de Investigación en Zonas Desérticas de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí de 2020 a 2024, donde se enfocó en cuestiones de la conectividad hidrológica en varios contextos ambientales, publicando sus resultados en revistas especializadas en cuestiones hídricas. El tema del que nos hablará es justamente lo que trabajó en el Instituto de Zonas Desérticas bajo la dirección del Dr. Carlos Alfonso Muñoz Robles.Ha colaborado en la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México y en el campus Juriquilla en Querétaro de la misma universidad. Es una joven científica formada en los programas universitarios de la UASLP y formada como investigadora en el programa de Ingeniería y Ciencias de Materiales que es uno de los más importantes programas de formación científica de la UASLP que reúne a un buen número de dependencias universitarias dedicadas a la investigación científica y donde participan grupos de investigación en diversas áreas del conocimiento. En este programa que está cumpliendo veinte años, han egresado más de doscientos investigadores con el grado de doctor, entre los que se encuentra la Dra. Azalea Judith Ortiz Rodríguez.
Los invitamos este miércoles 29 de octubre en la Cervecería San Luis a escuchar la charla sobre agua en el tema de conectividad hídrica, que nos presentará la Dra. Judith Ortiz.
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#4 Tiempos
La seriedad y la risa | Columna de Juan Jesús Priego Rivera
LETRAS minúsculas
Un amigo mío, ejecutivo de cierta importancia, tan pronto como llega a su oficina arquea las cejas, se compone la corbata y adopta una pose tan autoritaria que a uno le dan ganas de obedecerle en todo. ¡Dios mío, qué transmutación de un minuto a otro y de una puerta a la siguiente! ¡Pero si apenas hace cinco minutos venía en su auto contando chistes rojos! Cuando se apeó del automóvil aún sonreía, pero apenas entró en el edificio adoptó un tono tan cadavérico y malhumorado que ya sólo verlo daba miedo. ¿Estoy ante uno de esos que los psicólogos llaman ciclotímicos?, me preguntaba yo lleno de asombro, pues no me explicaba cómo se podía pasar de un estado de ánimo a su contrario de manera tan radical y, sobre todo, en tan corto tiempo.
-Señorita –dijo mi amigo apretando un botón y levantando una bocina-, ayer por la tarde le pedí que revisara el expediente X. ¿Lo hizo usted?
La señorita tartamudeaba en la lejanía, presa de un pánico feroz.
-Sí, sí, lo he hecho. ¿Quiere usted revisarlo, licenciado?
Yo miraba a mi amigo como preguntándole: «¿Eres tú? ¿De veras eres tú?». Pero él hizo como que no entendió mi pregunta, y en eso la secretaria anunció la llegada del famoso y temido expediente X.
Entonces recordé lo que, según dicen, aconsejó una vez Anaximandro el filósofo a Pericles el político: «Acuérdate de lo que te digo: para seguir en el poder hay que ser serios». Y sonreí con cierta malicia, como entendiendo por fin de qué iba la cosa. Pero, ¿había leído mi amigo a los filósofos griegos?
Lo dudo. Ya el Memín Pinguín hubiera sido demasiado para él. Y esto lo digo no en plan de mofa, sino ateniéndome a lo que él mismo me dijo un día, a saber: que el único libro que había leído en su vida, y de eso hacía ya muchos años, era el instructivo de una cámara Nikon que acababa de comprar en aquel entonces; pero, de ahí en fuera, nada más…
–Es apasionante leer los instructivos y a la vez muy divertido –me dijo aquella vez-. Pero, ¿quién lee ya estas obras maestras de la concisión? ¡Es la literatura más olvidada de todas! No miento si te digo que mi modesta biblioteca personal, si puedo llamarla así, está formada sólo por esos instructivos o manuales de uso que la gente desecha con desconsiderada facilidad. ¡Tengo más de cien! Algún día leeré los noventa y nueve que me faltan.
¿Bromeaba mi amigo diciéndome estas cosas? Pero no, no bromeaba: recordemos que estaba en su oficina y que él, allí, no se habría permitido ni la sonrisa más discreta.
Pero ahora hablemos de una mujer a la que conozco. En su juventud fue algo hermosa, según pude verlo en viejas fotografías conservadas con devoción por ella misma en un álbum que, de tan pesado, nadie aceptaría cargar durante cinco minutos seguidos. Sí, digamos que fue bella. Pero cometió en su juventud el error de hacer caso a una amiga suya del colegio que le dijo un día:
-No permitas que tu hermosura se estropee. Evita, sobre todo, las patas de gallo.
-¿Y cómo las he de evitar? –preguntó ella, pues realmente le quitaban el sueño todas estas cosas.
-No rías. Y, si puedes, evita también las sonrisas. ¡Estropean el rostro como no tienes una idea! Lo arrugan, lo ajan, lo deforman.
¡Lo mismo pensaba aquel monje amargado de El nombre de la rosa!: «La risa sacude el cuerpo, deforma los rasgos de la cara y hace que el hombre parezca un mono».
Desde entonces aquella mujer ya nunca rió, conformándose, para manifestar su alegría, con estirar la boca y hacer una mueca, cual si estuviera ante un espejo comprobando que no se le ha quedado nada entre los dientes después de haber comido. ¿Sonreír de veras? No, gracias. Debo cuidarme de las patas de gallo.
Y así podría contra infinidad de historias más; baste por el momento con decir que, si bien la sonrisa tiene enemigos, yo preferiría mil veces que nadie me obedeciera y todo se me arrugara, a andar por la vida mostrando una horripilante cara de tabla.
Escribió el padre Auguste Valensin en su diario (anotación del 10 de mayo de 1937): «No sentir miedo de Jesús, no sentir miedo de mi Padre. Me imagino a Jesús con sus apóstoles. Llega a la orilla del lago donde los niños juegan. Y, al verlo, huyen los niños. Una madre le trae a su niñito de seis años y el pequeñín, aterrorizado, se agarra a las faldas de su madre, grita, quiere escaparse de allí. ¡Lo contrario de lo que sabemos que ocurría! Y me pregunto: ¿qué sentimientos hubiera experimentado Jesús? ¡Es tan doloroso darse cuenta de que se infunde miedo! Y todavía el miedo de un niño no puede realmente entristecernos porque es irrazonado, pero Jesús, que vino por amar a los hombres y fue todo amor para ellos, si hubiera visto a los que se acercaban a Él y a quienes ofrecía su afecto retirarse muertos de miedo; si hubiera visto a sus apóstoles tratarle como un maestro severo, mientras que Él se mostraba para con ellos indulgente y suave; si hubiera visto que los pecadores evitaban incluso por respeto su presencia, ¡qué pena hubiera experimentado!».
Jesús debió sonreír, y muy a menudo; debió ser incluso un maestro en el arte de la sonrisa, pues de no haber sido así, ¿por qué iban los niños a correr a abrazarlo espontáneamente, como sabemos que lo hacían? Somos más bien nosotros, sus discípulos, quienes hemos caído a veces en la tentación de la seriedad. ¡Como si por parecer serios nuestros enemigos fueran a respetarnos más! Quizá sea demasiado injusto al decir esto, pero un cristiano que infunde miedo –sea cual fuere su trabajo en la viña del Señor-, aún no ha podido ser cristiano más que a medias.
¿O me equivoco, estimado lector?
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#4 Tiempos
De CU a mantener el vuelo | Columna de Arturo Mena “Nefrox”
TESTEANDO
El miércoles pasado, San Luis se metió al Olímpico Universitario con una misión que parecía cuesta arriba. No solo enfrentaba a un Pumas que venía sólido en casa, sino también a sus propios fantasmas: los de la irregularidad, los de las derrotas que llegan cuando mejor se juega, los de las oportunidades que se escapan entre los dedos. Pero esta vez fue distinto. San Luis ganó con autoridad, con orden, con un fútbol maduro que pocas veces le habíamos visto.
El 0-1 en Ciudad Universitaria no fue casualidad. Fue el reflejo de un equipo que, por fin, entendió cómo competir en escenarios grandes. San Luis supo cuándo presionar, cuándo replegarse, cuándo hacer daño. No se desesperó, no se partió, y sobre todo, no perdió la concentración cuando Pumas quiso despertar. Ese temple, tan ausente en otras jornadas, fue la verdadera victoria de la noche.
Esa actuación le devolvió el alma a un grupo que venía entre dudas. Y también reavivó la ilusión de una afición que, aunque exigente, sigue esperando ese golpe de autoridad que confirme que este proyecto puede trascender. Porque lo del miércoles no fue solo un triunfo más en el calendario: fue una declaración de intenciones.
Ahora viene lo más difícil, mantener el vuelo. Este domingo, en el Alfonso Lastras, el Atlético de San Luis recibe a Necaxa, y la exigencia será enorme. No hay mejor momento para demostrar madurez que justo después de una victoria grande. Ganar en CU fue una proeza; ganar en casa, jugando bien y con convicción, sería confirmar que este equipo va en serio.
Necaxa no es un rival cómodo. Es uno de esos equipos que no necesita brillar para complicarte la noche. Sabe esperar, sabe morder en la presión alta y tiene la capacidad de castigar errores puntuales. San Luis deberá ser paciente, no caer en la trampa de la desesperación y, sobre todo, mantener la intensidad de principio a fin. Si el equipo logra imponer su ritmo desde el arranque, tendrá mucho camino recorrido.
El cuerpo técnico también enfrenta un reto importante. Después del esfuerzo en CU, habrá que administrar energías, rotar inteligentemente y evitar el exceso de confianza. Porque si algo ha caracterizado a San Luis este torneo, es que cuando baja un poco la guardia, el golpe llega rápido. La victoria del miércoles solo tendrá valor real si se respalda con un buen resultado el domingo.
En el plano anímico, el grupo parece haber recuperado algo vital, el orgullo.
Durante semanas se vio a un San Luis que jugaba bien, pero sin convicción. En CU hubo otra cara, una que pelea cada balón, que se ordena en bloque y que no teme al rival, sea cual sea su nombre. Esa versión es la que debe presentarse ante Necaxa.El Lastras jugará su papel. Después de un triunfo así, la gente volverá con ganas, con ilusión, pero también con exigencia. El público potosino ya no se conforma con “haber competido bien”. Quiere resultados, quiere consistencia. Y tiene razón, este plantel ha demostrado que puede hacerlo.
Además, los números comienzan a sonreír. Con el triunfo del miércoles, San Luis se metió de nuevo a la conversación por el play-in, y depende de sí mismo para mantenerse ahí. Una victoria más lo consolidaría en zona de clasificación y le permitiría encarar el cierre del torneo con un aire distinto. El margen de error sigue siendo corto, pero las sensaciones por primera vez son positivas.
El Atlético de San Luis ha dado un paso importante, pero todavía no puede detenerse a celebrar. Lo que viene es el examen de la madurez futbolística: sostener la intensidad, mantener la concentración y convertir las buenas actuaciones en una costumbre.
Este domingo, el equipo tiene la oportunidad de confirmar que no fue casualidad, que lo de CU fue el inicio de una nueva etapa. Ganarle a Necaxa sería más que un triunfo, sería la señal de que San Luis, por fin, ha aprendido a ganar seguido.
Porque el fútbol no premia al que brilla un día, sino al que resiste toda una temporada. Y si este grupo logra mantener ese temple y esa convicción, el play-in podría dejar de ser un sueño para convertirse en la consecuencia lógica de un equipo que, tarde pero seguro, está aprendiendo a jugar como los grandes.
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