#4 Tiempos
El éxito que todos buscan | Columna de Óscar Esquivel
Desafinando
En este mundo arrebatado y a un paso de romperse orden, desentendimiento por la vida, lo individual un tesoro, los otros, son los otros, yo soy yo. La sociedad quiere a como dé lugar mantener su estatus de vida aun en su propia casa.
En la búsqueda insaciable de alcanzar el éxito, lo llevamos hasta la convivencia en el seno familiar, la competencia del “aguante” de la tolerancia a punto de quebrar, la desesperación de los jóvenes el ver su vida truncada en esta temporal crisis, esa exasperación de no poder continuar, imaginan un fracaso, creyendo que nunca llegara el éxito, tristemente por esta razón se han incrementado el número de suicidios en jóvenes de 15 a 25 años, en esta ya, cuarentena de 67 días.
La búsqueda del éxito, para algunas personas, es tratar de hacer lo que otras no podrían hacer, las escuelas y en la familia tratan de inculcarles valores y capacidades para incrementar las posibilidades de triunfar en las tareas que se les encomienda.
Con el caos encima, vemos personas de la vida pública como ejemplo de éxito profesional, los médicos un ejemplo claro, sin embargo y a pesar de ello, minimizamos sus capacidades, ignorándolos y llegado el momento, al grado de agredir a los galenos, enfermeras o personal de salud que acuden al campo de batalla contra en Covid 19.
Cifras van y vienen del Subsecretario Gatell y en la línea de salida todos estamos esperando la llegada de la “Nueva Normalidad” impacientemente, la poca claridad de cómo se genera la información, la incertidumbre aparece, queremos dar el primer paso y el pánico se apodera por la información que no es precisa, incluso ya les afecto a gobernadores como Rodríguez Calderón de Nuevo León o Enrique Alfaro de Jalisco, ambos sintiéndose en la cima del éxito, se dedicaron a denostar y despreciar las políticas estratégicas del gobierno federal por la pandemia, y ahora, ambos estados, son donde aumentan desproporcionadamente las personas infectadas y muertas. Por querer encontrar el éxito político, les cayó como “anillo al dedo” la pandemia, pero desafortunadamente se les encogió el dedo; El Bronco ocupa el número 31 de los peores gobernadores en evaluación ciudadana y el otro, Alfaro, con su posturas hitlerianas, convencido que la fuerza es el mejor camino para persuadir a la gente, solicito al Congreso del Estado de Jalisco, un préstamo de mil millones de pesos, de ahí tomo 130 millones para rehabilitar un hospital privado para la gente de bien…para los pobres, cubrebocas “Made in China”.
PERIODISMO DE BIEN
Como todos buscan el éxito, incluso pasando encima de los demás, generando las peores posturas inhumanas mezquinas, existe una profesión que es vital para mantener un equilibrio entre ciudadanos y autoridad, con información, análisis, crítica certera y esa profesión es el periodismo. Si lucho por un ideal, que sea igualar a los desiguales… Si señalo errores, que sea para el bien de las mayorías… Que tenga siempre una razón para ser periodista y merecer ese honroso título. Fragmento Oración del Periodista Lic. Abel Esquivel Avalos, (1959).
Sabemos que el poder marea, desvirtúa a las personas de sus propósitos, se enaltece el ego.
Durante cuatro décadas, el país se convirtió en el más desinformado del mundo occidental, las grandes empresas televisivas puntualmente TELEVISA, con el afán de proteger sus intereses, generó un escuela de periodistas que sirvieron solo y exclusivamente al poder, los presidentes hablaban a través de ellos, encubrieron los actos más desdeñables del crimen, la corrupción la hicieron suya, callaban ante la impunidad, ahora todos son multimillonarios, crearon empresas de “comunicación” donde la facturación alcanzaba hasta 1200 millones de pesos en contratos con el gobierno federal, como es el caso de Joaquín López–Dóriga.
Algunos los que guardan los mayores secretos, “despedidos” de la pantalla, fueron “reacomodados” en W Radio, o Radio Fórmula entre otros, casualmente del mismo dueño, Emilio Azcárraga Jean, todos y digo todos son los que han fomentado las falsas noticias, desinformación acertada, sin sustento y sin derecho de réplica, todo lo propagan en las redes sociales, Loret de Mola, Ciro Gómez Leyva, Raymundo Rivapalacio, Miguel Alemán, Adela Micha, Pablo Hiriart , varios más.
La postura de cerrazón abona para desacreditar, persistente y tenaz de los “comunicadores” en cuestión del presidente López Obrador, el mandatario debe dejar de negarse y abrir un gran foro nacional, con dialogo se podrán atender muchos de los temas importantes para el país, incluso con estos finos personajes; el presidente antepone ideales y se aferra neciamente a borrar el pasado, en ocasiones con consecuencias trágicas afectando a los más desfavorecidos que tanto menciona en su discursos.
El valor del conocimiento de la comunicación de masas, no logra permear en el equipo del presidente, muchas obras y acciones en favor de los pobres, son sin lugar a dudas benéficas para el país, desafortunadamente mal comunicado, poco claras, planteamientos que a todos hacen dudar, de ahí y por razones obvias el enojo unánime de los “periodistas” del ayer y hoy, como ya no reciben los “beneficios” gubernamentales y ahora los “financiamientos” vienen de otro lado, COPARMEX, ACCIÓN NACIONAL, SORIANA y muchos más, huérfanos del chayote que los llevo a la cumbre del éxito.
¿Cuándo se ha escuchado de ellos un “Quédate en casa”? solo buscan los muertos, como la parvada de buitres que son.
LA CONSTRUCCIÓN, SALVACIÓN ECONÓMICA.
Ya no se entiende, ¿recuerda a Carlos Urzúa, exsecretario de Hacienda de AMLO? hoy convertido en crítico acérrimo de las políticas económicas de la 4T, con la llegada de pandemia del Covid 19, “exigía” la cancelación de las obras del gobierno federal, como Tren Maya, refinería de Dos Bocas, el Aeropuerto Felipe Ángeles de CDMX, para que con el dinero de esas obras enfrentar el desempleo principalmente, ¡por supuesto! vitoreado al grado de santo.
Pues bien, en una columna escrita por él, hace referencia a la Gran Bretaña en la crisis del 2009 …”recortaron presupuesto al ver caída de ingresos tributarios, frenaron el gasto público” y reitera Urzúa “y así les fue a lo británicos, sus sectores de la construcción y la manufactura cayeron estrepitosamente, tardando años en reponerse” y concluye con una referencia del economista Richard Musgrave “solo preocúpense de generar empleos, el balance presupuestario llegara con el tiempo”, ¿entonces? Don Carlos acepta que la obra pública y privada de los sectores de la construcción es de las más dinámicas y generadora de riqueza, entenderíamos sus posturas anteriores, solo para alcanzar el éxito mediático dentro y fuera de su círculo virtuoso académico, pero si él mismo, dentro del equipo de transición, aceptó la realización de las obras y ahora confirma que son viables, error, omisión o pago de favores, pero Carlos Urzúa se equivocó.
Nos saludamos pronto.
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#4 Tiempos
Cinco finales, cinco retratos | Columna de Arturo Mena “Nefrox”
TESTEANDO
El fútbol mexicano vive instalado en un vaivén que mezcla memoria corta, intensidad desbordada y una elasticidad competitiva que rara vez se ve en otros torneos. Y no hay mejor espejo de esa naturaleza cambiante que las últimas cinco finales de la Liga MX. Cada una reveló una cara distinta del campeonato, a veces impredecible, a veces cuidadosamente edificado, pero siempre dispuesto a romper pronósticos.
La más reciente, la del Clausura 2025, entregó un desenlace que pocos anticipaban. Toluca superó a América y recuperó un lugar que parecía extraviado en la élite. Esa serie tuvo un aire de reivindicación para los escarlatas, que encontraron una mezcla perfecta entre orden, temple y puntería. América, por su parte, llegó con la etiqueta inevitable de favorito, pero terminó cediendo ante un rival que administró mejor la presión. En ese desenlace se confirmó que en México los ciclos pueden renacer más rápido de lo que tardan en extinguirse.
Un semestre antes, en el Apertura 2024, las Águilas habían impuesto su jerarquía ante Monterrey. Fue una final marcada por el contraste entre un equipo construido para dominar y otro diseñado para golpear en ráfagas. América resolvió porque entendió cuándo acelerar y cuándo enfriar; Rayados quedó atrapado en la tentación del vértigo y pagó caro su falta de pausa. La serie se volvió una lección de que, en liguillas, el músculo emocional pesa tanto como el táctico.
El Clausura 2024 repitió campeón, América doblegó a Cruz Azul en un duelo donde la narrativa histórica parecía empujar a los celestes, pero terminó imponiéndose la estructura más estable. No fue una final espectacular, pero sí una muestra de oficio. América manejó los tiempos como si los hubiera ensayado toda la vida y Cruz Azul, que había encontrado ritmo durante la fase final, se quedó sin margen en el momento en que la exigencia aumentó.
En el Apertura 2023, el mismo América se cruzó con Tigres en una final que resumió la última década del fútbol mexicano, dos potencias creando tensión desde su experiencia y su peso institucional. Fue una confrontación áspera, tensa, en la que el primer error podía decidirlo todo. América fue más certero y Tigres, pese a su capacidad para competir siempre, no encontró esa chispa que tantas veces lo salvó en finales previas.
Y antes de que América dominara este tramo de la historia reciente, el Clausura 2023 había dejado un capítulo distinto, Tigres había vencido a Guadalajara en una final que mezcló dramatismo y resistencia. Chivas llegó con un impulso sentimental fuerte, respaldado por un cierre de torneo que había reavivado ilusiones; Tigres, en cambio, se aferró a la experiencia y convirtió la serie en un duelo donde la paciencia terminó valiendo oro.
Cinco finales, cinco historias desiguales, pero todas con un hilo común, la liga mx vive entre la tradición y la renovación constante. América ha sido el protagonista dominante, sí, pero no en un territorio exclusivo; Toluca reapareció con fuerza, Tigres mantiene su lugar entre los gigantes modernos y Cruz Azul y Monterrey continúan orbitando entre la aspiración y la frustración.
Lo fascinante es que cada una de estas series dibuja una tendencia distinta. A veces gana el que mejor juega; otras, el que comete menos errores; y en más de una ocasión, el que simplemente logra sobrevivir a su propio caos. La Liga MX no premia únicamente la excelencia: premia la capacidad de adaptarse a un torneo donde cada semestre puede contar una historia completamente diferente.
Eso explica por qué sus finales, aunque repetidas entre ciertos protagonistas, nunca se sienten iguales. Cada una deja marcas nuevas, dudas nuevas y certezas que duran apenas unos meses. Y quizá ahí radica la esencia de este futbol, un territorio donde la estabilidad es un lujo, el dramatismo una obligación y el título, el botín que confirma que, al menos por un instante, todo salió bien en medio de un ecosistema que siempre está cambiando. Hoy Toluca puede volver a levantar el título o Tigres recuperar lo perdido hace unos torneos, pero sea cual sea el resultado, no queda duda que esta liga es un reflejo de lo extraño y competido que resulta nuestro casero futbol nacional.
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#4 Tiempos
Enrique Mesta Zuñiga, el filósofo autodidacta | Columna de J.R. Martínez/Dr. Flash
EL CRONOPIO
La revista Letras Potosinas es la continuación de la revista Bohemia. Continuación en el sentido que en 1947 Bohemia cambiaba de nombre a Letras Potosinas, lo que sucedió en el número de edición 51, mostrando la numeración consecutiva. Esta revista, vocero de cultura de la patria chica, como referían sus editores, y conducía su mensaje cordial a los estados hermanos y al extranjero. Esa nueva época, mantenía su cuerpo de colaboradores y a aumentaba sus filas con positivos valores en el arte y en las letras del solar potosino.
Entre los colaboradores, estaría presente en sus páginas Enrique Mesta Zuñiga, un periodista que contribuiría con artículos de corte filosófico, enriqueciendo la labor humanista y difusión artística de Letras Potosinas.
Con la participación de Mesta, la revista potosina contribuía a la divulgación de la filosofía siendo así una de las pioneras en el siglo XX en abrir espacios a esta actividad de filosofía, que no era común en el país.
Don Enrique Mesta Zúñiga, nació en la ciudad de Cuencamé, Durango, el día 28 de julio de 1905. Sus estudios de primaria los realizó, en su natal Cuencamé y después, se dedicó a estudiar por su cuenta, especialmente libros de filosofía, que eran la pasión de su vida. Allí tenemos a otro autodidacta que llegó a lograr las alturas en la filosofía.
Su actividad profesional sería el periodismo, fundando revistas culturales en la región lagunera, como la revista Cauce, formando parte del grupo cultural que floreció y dio auge a las letras y al arte en todas sus manifestaciones. Toda su vida la dedicó a trabajar en diversos periódicos como luego veremos, así como a escribir serios artículos filosóficos y de comentarios literarios.
Esta labor cultural lo acercaría a los editores de Letras Potosinas y sus artículos se hicieron presente en la revista, aportando a los lectores potosinos en temas de filosofía. Dentro de las áreas de reflexión de la filosofía, se enfocó en cuestiones de ciencia, filosofía de la ciencia, sobre lo que publicaría varios libros.
La relación entre ciencia y humanismo fue uno de sus temas de reflexión filosófica. Entre los temas que abordara se encuentra el de la necesidad de la búsqueda o creación de un nuevo humanismo que contemplara los nuevos adelantos de la física cuántica y su repercusión en la percepción del universo y del papel del hombre.
Con el progreso técnico derivado de la nueva física se incrementa la infelicidad del género humano de múltiples maneras. Esta carrera contra el tiempo, para proteger a la humanidad contra sus propios desmanes y sus propias tragedias, es un tema predilecto de Toynbee, aquí en México nos lo aconsejó, subraya Mesta: “hay que ganar tiempo, el tiempo indispensable para que las diferentes civilizaciones de nuestro mundo puedan adaptarse la una a la otra”.
Empero, asegura Mesta, para acelerar una función simbiótica de las civilizaciones, la humanidad necesita darse completa cuenta de que la física cuántica al desindividualizar las partículas elementales desindividualizó asimismo a los hombres y al hacer ininteligible el determinismo acabó con la gloriosa interpretación lineal del progreso.
Corresponde a los humanistas trasladar sus instrumentos de las praderas de la metafísica y del arte a los inquietos laboratorios donde las ciencias están formando un nuevo mundo para que los hombres aprendan juntos a sobrellevar una vida humana y más justa.
Hay que hacer que, como ya lo intentaron Planck, Einstein, Freud y Schrödinger, persistan en potenciar y en ampliar su específica labor teniendo más presentes los cambios que su ciencia provoca en los ideales y en los quehaceres inacabables de los hombres.
Tal como lo apunta Mesta, los métodos en ciencias y humanidades que oscilan entre el polo metonímico y el polo metafórico, si bien son diferentes, se vinculan con la necesidad de una representación del mundo que en el fondo lleva el conocer el papel del hombre en el cosmos para lo cual transitan metodológicamente entre ambos polos.
Enrique Mesta, ese filósofo autodidacta, murió el 23 de agosto de 1984, en Torreón Coahuila, debido a un paro cardiaco de Etiología desconocida. Contribuyó a la divulgación de la filosofía y colaboró en el desarrollo cultural de San Luis Potosí.
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#4 Tiempos
El administrador astuto | Columna de Juan Jesús Priego Rivera
LETRAS minúsculas
«Un hombre rico tenía un administrador y le fueron con el cuento de que éste derrochaba sus bienes. Entonces lo llamó y le dijo: “¿Qué es eso que oigo decir de ti? Dame cuenta de tu gestión porque quedas despedido”» (Lucas 16, 1-15).
Cuando Jesús contó esta parábola nada dijo de cómo recibió el administrador tan mala noticia. ¿Retrocedió espantado?, ¿sintió que el piso se movía bajo sus pies como un tapete?, ¿intentó defenderse o ya por lo menos justificarse? Nada de esto sabemos; lo que sí sabemos, en cambio, es que más bien se puso a hacer cálculos en su interior, diciendo:
«-¿Qué voy a hacer ahora que mi patrón me quita el empleo? Para cavar no tengo fuerzas; mendigar, me da vergüenza. ¡Ya sé lo que voy a hacer para que, cuando me echen de la administración, haya quien me reciba en su casa!».
El foco, como se dice, se le había prendido. Pero, ¿qué era eso? Quiero decir, ¿qué fue se le ocurrió para que ahora que estaba desempleado no le faltara por lo menos un mendrugo de pan y un vaso de agua fresca? En realidad, algo muy ingenioso y sutil: como aún no había rendido el informe que le exigía su amo, todavía era tiempo de alterar ciertos papeles… Y esto es lo que hizo:
«Fue llamando uno por uno a los deudores de su amo y preguntó al primero:
»-¿Cuánto debes a mi patrón?».
La pregunta, por supuesto, era retórica, pues los documentos los tenía él en su mano y a la vista, y bien escrito estaba en ellos el monto de la deuda; lo que quería, más bien, era causar en su interlocutor un cierto impacto difícil de olvidar.
«-Cien barriles de aceite –respondió el deudor, que aún no sabía muy bien de qué iba la cosa.
»-Aquí está tu recibo; date prisa, siéntate y escribe: cincuenta».
Ya podemos imaginar el gozo con el que éste hizo lo que el administrador le pedía. ¡Le estaba perdonando nada menos que la mitad de la deuda! Es como si yo debiera al banco 100.000 pesos y de pronto el gerente me mandara llamar para decirme, guiñándome el ojo, que a partir de ahora no debo más que 50.000. ¿No era esto como para ponerse a gritar de alegría e invitarle un café en el restaurante más elegante de la ciudad?
El administrador mandó llamar al segundo deudor y le hizo la misma pregunta que al primero:
«-¿Cuánto debes a mi patrón?
»-Cien costales de trigo –dijo éste a su vez.
»-Aquí está tu recibo: escribe ochenta».
Y así hizo con todos los otros. Si de cualquier manera lo iban a despedir; mejor dicho, si ya estaba despedido, ¿qué perdía haciendo lo que hizo? ¡No perdía nada! Todo lo contrario: se jugó la última carta y había ganado, porque estos deudores iban a quedar eternamente agradecidos con él. ¡Su vejez estaba asegurada, pues un día lo invitaría uno a su casa a comer, y otro día otro! Ya no tendría que mendigar ni que andar por las calles del pueblo extendiendo la mano en busca de un pedazo de pan… Se retiraba, por decir así, con la cabeza levantada y pisando fuerte.
¡Qué hombre más inteligente!
Jesús mismo no pudo menos de alabar su ingenio. ¡Cómo, antes de ser despedido, supo hacerse amigos que después ya no lo dejarían solo! «Por eso les digo yo –concluyó el Maestro-: con el dinero, tan lleno de injusticia, gánense amigos para que, cando esto se acabe, los reciban en las moradas eternas».
Con esta sencilla historia, Jesús ha querido responder a estas dos preguntas que, si no fueran eternas, creeríamos que son banales «¿Para qué sirve el dinero?, ¿para qué sirve el poder?». Y su respuesta es: para que te hagas todos los amigos que puedas: sólo para eso. ¿Eres rico? Hazte amigos. ¿Eres poderoso, ocupas un cargo de cierta importancia? Hazte amigos igualmente.
Hay quienes, al tomar posesión de un cargo, empiezan a ver a los demás mortales como a hormigas (¡tan encumbrados se sienten ocupando su flamante escritorio de caoba!). Bien, que se anden con cuidado, porque no siempre estarán ahí, porque la rueda de la fortuna gira y gira y no es nada seguro que los que están arriba permanezcan en la cumbre eternamente. Sí, la fortuna es una rueda que no deja de girar: los que hace poco estaban abajo, resulta que ahora están arriba, y si no los trataste bien cuando tenías la sartén por el mango, como se dice, ellos lo recordarán una y otra vez, y ahora será la suya.
Hay quienes piensan que el poder es necesario para enriquecerse, y que el enriquecimiento es ya en sí mismo una forma de poder; en una palabra, que la riqueza y el poder se bastan a sí mismos. Si así es como piensas tú, déjame decirte, lector, que te equivocas. ¡Rompe el círculo! Hoy que la vida te ha favorecido, favorece a los que puedas, porque nada sabes del futuro. Haz como el hombre de la parábola: gánatelos a todos, porque no siempre serás administrador y quizá un día el patrón de turno te mande llamar para decirte:
-Dame cuenta de tu gestión porque estás despedido.
Si esto te dijeran sin que te hubieras hecho amigo de nadie, entonces sí que estarás perdido.
Toda la sabiduría de la vida está en esta sencilla parábola. Hazte amigos ahora que puedes; porque, si no lo haces ahora, quién sabe si lo podrás hacer mañana. «Conoce la ocasión o la oportunidad»: según Pítaco, el filosofo griego, no había conocimiento en el mundo más útil que éste.
Sí, aprovecha la oportunidad, porque mañana, sin que te des cuenta, quizá sea ya demasiado tarde.
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