#4 Tiempos
López y López, los dueños de la agenda nacional | Columna de Jorge Ramírez Pardo
Enred@rte
En América Latina hay un hecho repetido hasta la caricatura por élites privilegiadas, algunos de sus empleados en rango directivo/ejecutivo, nuevos ricos y aspirantes a serlo: No quieren gobiernos que limpien la corrupción, apoyen a sus mayorías e intenten un ejercicio cercano a los postulados democráticos.
Los últimos, los aspirantes a nuevo rico o comparsa privilegiada, podrían ser clasificados como “lumpenchatarristas” (lo contrario a lumpenproletarios), en términos conceptuales del materialismo dialéctico.
Cuando el presidente chileno Salvador Allende estuvo en el poder, igual que ahora sucede en México con López Obrador (y en estos días de pandemia, a su lugarteniente, el médico Hugo López Gattel), tenía de su lado al grueso de la población; pero un grupo pequeño de plutócratas desplazados, en Chile apodados “momios”, lograban hacer enorme escándalo en manifestaciones caseroleras. Esto es, salían a las calles céntricas de la capital Santiago y sonaban sus cacerolas vacías porque “no tenían qué comer”. Hay evidencia de que, ese mismo sector social controlaba el comercio de abastos, ocultaba mercancía y especulabas con ella para su encarecimiento y condimento al chantaje cacerlolero.
Salvador Allende, igual que ahora López Obrador, también fue varias veces candidato a presidente de su país, y siempre, como el mexicano, despreciado por la élites privilegiadas y proclives a distintos ejercicios de corrupción.
Como sucedió a Salvador Allende en Chile, 1973; había sucedido en 1954 al presidente guatemalteco Jacobo Árbenz, derrocado por un golpe de estado orquestado y financiado por la CIA; algo similar sucedió en 1964 al gobierno brasileño del presidente João Goulart.
Machuca o la mirada infantil
El trasfondo del caso chileno, con matiz de tragicomedia involuntaria, es el telón de fondo de la estupenda película “Machuca”, 2004, de Andrés Wood.
La parte inductiva, o primer plano narrativo del film es el siguiente:
Es 1973. El gobierno de Allende decide implementar en el Saint George’s College, de padres jesuitas, uno de los colegios privados más reconocidos en Santiago de Chile, el ingreso subsidiado por el Estado para que niños con bajos ingresos estudien ahí. Pese a que los curas dueños del centro educativo estaban de acuerdo con dicha medida, la llegada del nuevo grupo (proletario) no pasa desapercibida. Los nuevos estudiantes son discriminados por su origen socioeconómico y la desigualdad en los conocimientos del idioma inglés, espejo de los problemas y desafíos de las transformaciones que empiezan a darse en el Chile.
Intentonas de golpe blando
La intromisión extranjera y local en México de emporios y financieros, está detrás de las marchas antigubernamentales, ahora desde automóviles, algunos de lujo, y con consignas discriminatorias de clase social alta o aspirante a serlo. En sus consignas, se refieren a quienes votaron por López Obrador como “seres no racionales, manipulables, comprables, que sólo votan con las vísceras, sin medir las consecuencias; dicen que el apoyo a la cuarta transformación viene de los no humanos, de los sin cerebro, los incultos”.
Otra película estrenada en San Luis Potosí, en este caso documental, “En nombre de la libertad. 4T y ultraderecha”, 2019, de Carlos Mendoza, hace más de un año –cuando aún no se desataban las marchas caceroleras momias a la mexicana-, ya se advertía el trasfondo golpista.
(A continuación, la reseña publicada en este mismo espacio el lunes 19 de agosto del pasado 2019; como se puede apreciar, la oposición patrocinada y carente de imaginación repite formas. Es cierto, el actuar de Morena no luce a la altura del momento, pero hay una crisis general en los partidos políticos).
El documental mencionado, aborda la reacción adversa de la ultra derecha mexicana al triunfo de Andrés Manuel López Obrador, con el apoyo de conocidos comunicadores (entre ellos, Ciro Gómez Leyva, Sergio Sarmiento, Joaquín López Dóriga) e intelectuales derechistas (Enrique Krause, Jorge Castañeda, Héctor Aguilar Camín, el literato peruano Mario Vargas Llosa y los expresidentes Vicente Fox y Felipe Calderón); ellos amplifican acciones del mandate vistas como erratas y/o contradicciones. También son comparsa para acciones de grupos de choque, en apariencia espontáneos, patrocinados e, incluso, capacitados por empresarios mexicanos y agencias internacionales.
Muestra la película, el intento latente de aplicación en México y contra López Obrador, la teoría del politólogo estadounidense Gene Sharp de “golpe (de Estado) suave” o “golpe blando”.
Sharp plantea: los golpes de Estado mediante la fuerza y las armas son obsoletos; hoy se combate con “armas sicológicas, sociales, económicas y políticas”. Para ello, muestra una fórmula con cinco pasos para derrocar gobernantes
- Ablandamiento, a través de algunos medios se crea malestar y desesperanza social.
- Deslegitimación, mediante la difusión de comentarios adversos al gobierno, mofas y noticias falsas.
- Calentamiento de las calles, con la promoción de constantes movilizaciones de protesta. Ejemplo en México: acusar a AMLO de criminal, luego del accidente aéreo cuando perdió la vida la gobernadora de Puebla.
- Combinación de todas las formas de lucha: corren rumores, se crea una falsa carestía, se acusa al gobierno de incompetente y se inician causas judiciales injustas contra gobernantes. Ejemplo, la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, en este momento suspendido a causa de la imputación de un juez.
- Fractura institucional, Causas judiciales prosperan, los medios lo apoyan y los gobiernos caen.
Dicho esquema, muestra el documental, ya se aplicó en diversos lugares de Latinoamérica con apoyo de consorcios económicos internacionales y la intromisión del gobierno de Estados Unidos a través agencias como la CIA y/o la USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional).
- En 2009, Manuel Zelaya fue destituido de la presidencia de Honduras con el apoyo de Washington.
- 2012, destitución del presidente de Paraguay Fernando Lugo.
- 2015, la oposición argentina intentó que el asesinato de un fiscal le fuera imputado a la entonces presidenta Cristina Fernández.
- 2016, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, fue destituida por presuntamente haber violado una ley presupuestaria, y ese mismo año el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva fue encarcelado acusado de corrupción, sin pruebas, y como el candidato más popular para volver a ser presidente de Brasil, se le mantuvo en prisión para allanar el camino al militar golpista Jair Bolsonaro.
Periodismo de anticipación
El documental, presenta con gráficas animadas el entramado de redes de “oposición” y sus patrocinadores de trabajo desestabilizador, de desinformación y violencia realizado por grupos y personas específicas que operan en el continente y cómo inciden en México.
Una de ellas, “Students for liberty”, recluta estudiantes en universidades públicas mexicanas y busca registrar a la agrupación juvenil ultraderechista “Ahora nosotros” como partido político ante el Instituto Nacional Electoral.
Muestra cómo la USAID, asiste a grupos extremistas y opositores en Venezuela y otros países de la región. Otros auspiciantes de estos grupos son las, también estadunidenses, Red ATLAS, Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas en inglés), y el Instituto CATO; con fondos de las Industrias Koch, el segundo conglomerado industrial de Estados Unidos. Todas tienen filiales en México o patrocinan organizaciones en el país.
Una de sus aliadas visibles es la conferencista guatemalteca Gloria Álvarez, coautora del libro “El engaño populista”, proyecto para el cual tuvo el apoyo de Enrique Krauze y Mario Vargas Llosa; Vargas, por cierto, también relacionado con CATO y Red Atlas quienes le patrocina su “Fundación internacional para la libertad”.
Se señalan vínculos entre CATO y la llamada “Operación Berlín”, auspiciada también por grupos empresariales para orquestar una campaña sucia contra López Obrador durante la contienda presidencial pasada, con la participación de Enrique Krauze, quien primero lo negó y luego lo asumió.
En suma, el documental “En nombre de la libertad. 4T y Ultraderecha”, hay amenazas más que latentes contra el gobierno de López Obrador, descrito como de centro izquierda, no radical, cuya apuesta antineoliberal aún está por confirmarse, según plantean los académicos entrevistados Enrique Pineda, Pascualina Curcio, Gibrán Ramírez Reyes y Carlos Fazio.
Colofón local
Los gobiernos potosinos, estatal y municipal, continúan silentes/cómplices de los acontecimientos vandálicos acontecidos la tarde del viernes negro 5 de junio. Lucen como autores de un telón distractor (por cierto, muy costoso en lo material y más en lo político de autogol) para ocultar corrupción en la Secretaría de salud, amedrentar a manifestantes en pro de causas ciudadanas y a congresistas cooptables, sembrar culpables a modo –tal es el caso de la activista Claudia Hernández, defensora de la Sierra de San Miguelito amenazada por constructores consentidos, habituales sobornadores con “moches”-.
Pronóstico elemental: el delincuente líder, Sebastián Domínguez López, nuevorrico apodado “mono blanco”, ya “se les peló” o lo ocultan. Los mandantes gobiernan desde su clase social privilegiada, y así quieren decidir el relevo gubernamental estatal…
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#4 Tiempos
LamBot del Tec de Monterrey-SLP bicampeones mundiales de robótica | Columna de J.R. Martínez/Dr. Flash
EL CRONOPIO
Hace quince años la comunidad de la Preparatoria del Instituto Tecnológico de Monterrey campus San Luis Potosí comenzó un proyecto educativo basado en la ingeniería robótica que incluye aspectos de seguridad y mercado, entre otros, dentro de la corriente de tecnología educativa que suele ser conocida como STEM, iniciales en inglés de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
El programa del Tec de Monterrey campus San Luis lleva el nombre de LamBot 3478 y su gran esfuerzo lo ha llevado a ganar la competencia mundial más importante en el campo de la robótica, el Campeonato Mundial de Robótica FIRST en dos ocasiones convirtiéndose en el equipo que lo ha realizado en dos ocasiones. La más reciente hace algunas semanas en el campeonato Mundial celebrado en Nagoya Japón convirtiendo así en el referente mundial en tecnología educativa.
Los flamantes campeones mundiales pertenecen a la Preparatoria del Instituto Tecnológico de Monterrey campus San Luis Potosí, y han puesto en alto el nombre de México de San Luis Potosí y de su institución educativa.
De esta forma el equipo LambBot 3478 son, nada más y nada menos que, Bicampeones Mundiales de Robótica FIRST, encabezando una alianza estratégica que les permitió obtener el título en una de las competencias estudiantiles más exigentes y reconocidas del mundo.
La Preparatoria del Tec de Monterrey en San Luis tradicionalmente ha impulsado la participación de sus alumnos en las competencias educativas que se realizan en San Luis y que son cauces para eventos nacionales y mundiales, entre ellas las olimpiadas de física, matemáticas, química, entre otras, así como la participación en el Concurso potosino conocido como Fis-Mat de alta tradición en el país. Estos programas de apertura de espacios de educación extraescolar han permitido a instituciones como el Tec de Monterrey campus San Luis incorporar a sus propios programas educativos y el ejemplo de éxito más notorio es el programa LamBot que su continuidad ha colocado a los alumnos y profesores de esa institución en el escenario mundial de proyectos colaborativos que redunda en la propia preparación de sus estudiantes.
Con esta victoria, LamBot se convierte en el primer equipo mexicano en obtener dos campeonatos internacionales de FIRST Robotics Competition. Su primer triunfo fue en 2019, durante el mundial celebrado en China. Ahora, seis años después, México vuelve a levantar el trofeo, reafirmando su compromiso con el desarrollo tecnológico juvenil. Lo cual se convierte en un hito sin precedentes para la robótica mexicana.
La competencia de FIRST (For Inspiration and Recognition of Science and Technology) reúne cada año a los mejores equipos del planeta, quienes deben diseñar, construir y programar robots capaces de ejecutar misiones complejas en escenarios de alta presión. Lo que distingue a este certamen no es solo la precisión técnica, sino la colaboración, el ingenio y el impacto social de cada proyecto.
Durante la edición 2025 del certamen, el equipo mexicano unió fuerzas con los equipos 987 y 6962, formando una alianza altamente eficiente que superó con éxito las rondas eliminatorias. Juntos desarrollaron una estrategia basada en la coordinación táctica, adaptabilidad y una ejecución impecable de los desafíos.
Este desempeño excepcional fue determinante para obtener el campeonato ante una audiencia global y más de 160 equipos provenientes de países como Estados Unidos, China, India, Turquía y Brasil.
La Federación Mexicana de Robótica realizará en los meses de marzo y abril de 2026 el Torneo Mexicano de Robótica (TMR) 2026 que tendrá como sede la ciudad de Puebla y el cual estará organizado localmente por el potosino Dr. Alejandro Pedroza creador del célebre robot pianista mexicano Don Cuco el Guapo. Este Torneo Mexicano de Robótica es el torneo selectivo para conformar la representación mexicana para el campeonato mundial de robótica, donde esperamos figure algún grupo potosino y donde con seguridad estará presente el equipo LamBot 3478 a quienes felicitamos por sus logros.
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#4 Tiempos
El misterio de los libros | Columna de Juan Jesús Priego Rivera
LETRAS Minúsculas
Ciudad de México. Tres y media de la tarde. Salgo corriendo, empujado por los demás, de una estación del metro. Subo corriendo las escaleras, busco la luz, descubro la calle, me echo a andar por ella. De pronto, me detengo. Los libros siempre me detienen, y allí, en ese tenderete colocado en la salida de la estación, hay muchos, muchos libros. Unos están metidos en fundas de plástico, pero la mayoría no; otros ni siquiera conservan la cubierta original. Descubro al instante uno que me interesa: Piloto de guerra, de Antoine de Saint-Exúpery. Me digo a mí mismo que es una lástima, porque ya lo tengo. Sigo. Ahora toca el turno a los Papeles del oficio universitario, de Álvaro D’Ors. ¿Cuánto por éste?
El vendedor lo ve detenidamente, lo acaricia, dice que es un buen libro, que él pensaba leerlo en días pasados pero que de cualquier manera está dispuesto a vendérmelo. «Veinte pesos –dice por fin–. Pero si escoge tres puede llevárselos por cincuenta».
No discuto el precio. Tomo el libro. Y me llevo también el Piloto de guerra para regalarlo a algún amigo necesitado de buenas lecturas.
–Así son cuarenta pesos. Ande, tome usted el tercero para que sean cincuenta.
Vuelvo a planear sobre los libros y encuentro en un rincón del tenderete El rabino de Bacharach de Heinrich Heine. No sabía que hubiera una edición mexicana de esta obra, y el hallazgo, aunque no me hace precisamente feliz, me hace por lo menos sonreír.
Pago y me voy. Y esa misma noche, antes de irme a dormir, empiezo a leer los Papeles de Álvaro D’Ors. En el frontispicio hay una firma, un nombre y una fecha. «Gastón Pardo P. Marzo de 1969. Guipúzcoa». Cierro el libro. Ya no quiero leer. ¿Quién fue Gastón Pardo P.? Y, sobre todo, ¿cómo hizo este ejemplar para llegar desde Guipúzcoa, en el País Vasco, hasta esta estación del metro, es decir, hasta mí?
Guipúzcoa. El nombre de esta ciudad me hace pensar en San Ignacio de Loyola. ¿Qué manos trajeron hasta acá este libro que hoy he comprado al precio de una cajetilla de cigarros de mediana calidad? Papeles del oficio universitario. No es que lo buscara, no, pero me salió al paso, y ahora está aquí, conmigo. De buscarlo, jamás lo habría encontrado; de buscarlo, acaso habría ido con el vendedor y le hubiera dicho: «Ando buscando los Papeles del oficio universitario de Álvaro D’Ors. ¿Lo tiene usted?». Y él se habría rascado la cabeza, fingiendo preocuparse por mi triste suerte:
–¡Uy, no! Esos libros son muy raros. A veces llegan, pero con frecuencia no. Hay libros que uno no verá nunca en su vida. Pero, ¿por qué no se da usted una vuelta el mes que entra? De cualquier manera, no se pierde nada…
Pienso bajo la luz de mi lámpara de noche que para encontrar un libro lo mejor es no desearlo, sino limitarse a dejar que llegue a nuestras manos cuando quiera, si es que llega alguna vez.
Así me sucedió en una ocasión con los Diarios de Ionesco. Sabía que la editorial Guadarrama de Madrid (hoy desaparecida como un barco en la noche) los había publicado en dos volúmenes, allá por la década de los años sesenta o setenta, con los títulos de Diario I y Diario II, pero me guardé mucho de buscarlos. «Son demasiado raros», me dije cuando los vi incluidos en el catálogo de dicha editorial: «por lo tanto, debes resignarte a no tenerlos». Me resigné todo lo que pude.
Pero un día, aquí mismo, en San Luis, debajo de una montaña de libros en una tienda de objetos usados, vi un tomito de lomo blanco en el que leí: Ionesco. Diario II. Lo tomé con calma, lo pagué y salí del establecimiento evitando dar saltos de alegría para no contrariar ni dar celos a la veleidosa Fortuna.
–Señora –dije a la dueña del establecimiento–, éste, como puede ver usted, es el segundo volumen de una obra que andaba yo buscando. ¿No le habrá llegado también el primero?
La señora movió negativamente la cabeza y me dijo que lo que yo veía era lo único que había llegado.
«Bien, Juan Jesús –me dije a mí mismo–. Ya tienes el tomo dos del diario de Ionesco. Confórmate, pues, con esta probadita que el cielo te ha ofrecido hoy».
Y varios meses después, en el mismo establecimiento, ¿qué cree usted? Que me encontré el dichoso tomo uno.
Se lo enseñé a la señora, y ella me explicó que lo que pasaba es que la persona que le había vendido el libro que yo le compré meses atrás apenas hasta ahora había regresado a venderle los demás que le quedaban en su casa. ¿Debo decir que sólo entonces permití a mi corazón brincar de alegría?
Pero continuemos con los Papeles de Álvaro D’Ors. ¿Quién los hizo cruzar el mar? ¿Era un exiliado español el que los trajo en su valija? ¿Y por qué de entre los muchos libros que pudo haberse traído cargó precisamente con éste?
¿O fue más bien un turista vasco que, trayéndolo consigo para leerlo en el avión, lo dejó en México para regresar a su tierra ligero de equipaje?
¡Ah, el misterio de los libros! Nunca sabremos por qué unos nos fueron ofrecidos por la vida y otros, en cambio, negados. Libros que ahora mismo se hallan recluidos a una cuadra de mi casa, jamás serán tocados por mí; en cambio, no me fue negado por la suerte uno que alguien compró en Guipúzcoa en 1969. ¿No es esto realmente misterioso?
Con los libros sucede lo mismo que con las personas: que, entre más se los busca, menos se los encuentra. Los libros, como las personas, sólo llegan a nosotros al precio de no buscarlos.
Me pregunto antes de apagar la luz: ¿Y con la felicidad no sucede lo mismo? Sí, sólo el que ha renunciado a ella la conocerá; sólo el que ha dejado de perseguirla la alcanzará.
Me quedo a oscuras. Y pienso en Dios, que nos da únicamente aquello a lo que ya hemos renunciado. Mi amado, mi querido, mi bendito Dios…
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#4 Tiempos
El pasado vestido de visitante | Columna de Arturo Mena “Nefrox”
TESTEANDO
Hay noches que no necesitan presentación, porque desde que amanece, el aire se siente distinto. Hoy es una de esas. San Luis juega en casa y enfrente no tiene a cualquiera: tiene al Monterrey, uno de los planteles más poderosos del país, pero sobre todo, tiene enfrente al pasado vestido de visitante. Domenec Torrent, aquel técnico que se fue dejando una sensación de proyecto inconcluso, regresa al Alfonso Lastras. Y no lo hace solo: lo acompaña Sergio Ramos, leyenda del fútbol mundial, que hoy pisa el mismo césped que tantas veces fue testigo del esfuerzo potosino. Es viernes, sí, pero de esos que huelen a domingo, a noche grande, a historia por escribirse.
El San Luis llega con cosas por ajustar, sí, pero también con certezas. La estructura que propuso Abascal en su debut tuvo orden, supo competir. La presión en bloque medio, la disciplina para cerrar líneas de pase y la paciencia para esperar el error del rival no son casualidades, son decisiones. San Luis sabe que no puede ganar desde la nómina, pero sí puede competir desde el plan. Y eso es algo que este equipo ha aprendido a hacer. Tiene jugadores con criterio, como Salles-Lamonge, que puede inventar algo cuando el partido parece trabado. Tiene futbolistas como Rodrigo Dourado, que saben cómo hacer que el rival se incomode, cómo romper el ritmo desde una barrida o una cobertura. Y tiene juventud con hambre, como Román Torres, que cada vez se siente más cómodo en este rol de vertical, rápido, incómodo.
Del otro lado está Monterrey, que viene golpeado por una derrota sorpresiva ante Pachuca, pero que no deja de ser uno de los equipos con más talento individual en toda la liga. Con nombres que pesan en cualquier cancha: Tecatito, Berterame, Jesús Gallardo, Maxi Meza, Alvarado… y ahora, el propio Ramos. Un central con décadas de experiencia al más alto nivel, un tipo que probablemente haya jugado partidos más difíciles en una semana que muchos de sus compañeros en un año. Su presencia no sólo impone desde lo físico; impone desde lo mental. Es un líder que ordena, que corrige, que exige. Hoy, esa jerarquía se pondrá a prueba en una cancha que, aunque pequeña en comparación con los grandes estadios europeos, sabe hacerse sentir.
Y ahí está el meollo del asunto. El partido no se va a jugar sólo en lo táctico. Se va a jugar también en las emociones. Torrent vuelve a la ciudad donde muchos lo consideraban el arquitecto de un equipo en crecimiento. Lo hará desde el banquillo contrario, pero con una libreta llena de apuntes sobre cómo se juega en esta cancha, sobre cómo respira la afición, sobre cómo reaccionan los jugadores locales en ciertas situaciones. Su regreso tiene algo de morbo y mucho de expectativa. ¿Qué tan bien conoce a su exequipo? ¿Podrá utilizar esa información para desnivelar? ¿O será la motivación del grupo potosino lo que incline la balanza?
El partido pinta para cerrarse rápido en la mitad del campo. San Luis no va a regalar espacios. Monterrey tampoco va a lanzarse como loco. La clave estará en quién tenga más paciencia. En quién logre imponer su ritmo. En quién sepa leer los momentos. Si los locales logran contener los primeros intentos rayados y mantener el cero, la confianza irá creciendo. Si Monterrey golpea temprano, entonces cambiará todo el escenario.
No hay partido fácil en esta liga. Pero hay partidos que se sienten diferentes. Y este lo es. Porque tiene historia reciente, porque tiene narrativa, porque tiene regreso y debut, porque tiene al Alfonso Lastras latiendo más fuerte. Y porque hoy, más que nunca, la gente de San Luis quiere creer que este equipo puede plantarse ante cualquiera. Que puede competir, que puede ganar. Que puede hacer historia, incluso si es apenas la jornada dos.
Esta noche el balón rodará con intensidad. Y con él, rodará también la memoria. Porque quizá con el tiempo, alguien recuerde que un viernes cualquiera de julio, en San Luis Potosí, se jugó un partido que no parecía importante… pero terminó siéndolo todo.
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