#4 Tiempos
La pionera del cuento fantástico latinoamericano | Columna de J.R. Martínez/Dr. Flash
EL CRONOPIO
La Agencia Potosina de Cultura sería un proyecto, que, si bien no pudo implementarse en su momento, significo un paso importante para institucionalizar los esfuerzos culturales que caracterizaron a San Luis potosí en la década de los cincuenta, cuando logró instalarse el Instituto Potosino de Bellas Artes y se iniciaron programas como los jueves literarios. La característica de esta Agencia de Cultura era que sus promotoras era mujeres ligadas a la vida cultural y literarias, entre ellas María Amparo Dávila Robledo.
Nacida en Pinos Zacatecas el 21 de febrero de 1928, llegaría San Luis siendo una niña e ingresó a estudiar la primaria en esta ciudad. Su vocación a las letras, la adquirió por el gusto a la lectura que descubrió en la biblioteca de su padre, según contará la propia Amparo Dávila. Su vida estuvo influenciada por la presencia de la muerte en personas cercanas durante su infancia, pues de cuatro hermanos solo ella sobrevivió a la infancia.
Se relacionó con la vida cultural en San Luis Potosí y participaría colaborando en algunas de las revistas locales como Cuadrante, donde se publicarían algunos de sus cuentos de corte fantástico colocados, según algunos especialistas, en la tradición de Edgar Allan Poe y Horacio Quiroga, en los que el horror y la oscuridad de la propia vida se traslapan a los textos. Lo que la coloca como la escritora de literatura fantástica latinoamericana. Sus narraciones fantásticas impresionaron al mismo Cortázar, con el que le unió una gran amistad. Una de sus narraciones que aparece en la Gaceta de la UNAM es la que lleva por título “El huésped”, en el que la escritora describe con suspenso y terror la llegada de éste:
“Nunca olvidaré el día en que vino a vivir con nosotros. Mi marido lo trajo al regreso de un viaje.
Llevamos entonces cerca de tres años de matrimonio, teníamos dos niños y yo no era feliz…
“Una noche estuve despierta hasta cerca de las dos de la mañana, oyéndolo afuera… Cuando desperté, lo vi junto a mi cama, mirándome con su mirada fija, penetrante… Salté de la cama y le arrojé la lámpara de gasolina que dejaba encendida toda la noche…
“Pensé entonces en huir de aquella casa, de mi marido y de él… Pero no tenía dinero y los medios de comunicación eran difíciles”.
La actividad cultural y académica que se vivió en San Luis en los cincuenta acercó a Amparo Dávila con Alfonso Reyes convirtiéndose en su secretaria, actividad que desarrolló durante dos años. Amparo Dávila se casó con el pintor Pedro Coronel, con el que tuvo dos hijas.
A lo largo de su carrera literaria se hizo merecedora a varios reconocimientos a su obra: recibió el Premio Xavier Villaurrutia en 1977; en 2013, fue homenajeada por el noveno encuentro de escritores, Literatura en el Bravo; en 2020 fue designada ganadora del Tercer Premio Jorge Ibargüengoitia de Literatura que otorga la Universidad de Guanajuato; en 2015 recibió la Medalla Bellas Artes por sus sobresalientes aportes a la literatura de México.
Amparo Dávila recibió la Medalla Bellas Artes en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes. En esa ocasión, la escritora comentó:
“Trato de lograr en mi obra un rigor estético basado no solamente en la perfección formal, en la técnica, en la palabra justa, sino en la vivencia. La sola percepción formal, no me interesa porque la forma no vive por sí misma; es, digamos, la sola justificación de la escritura”.
Desde ese año el Gobierno de México convoca un certamen nacional de cuento fantástico con su nombre: el Premio Bellas Artes de Cuento Amparo Dávila.
María Amparo Dávila Robledo moriría en la Ciudad de México el 18 de abril de 2020.
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#4 Tiempos
¿Y las Chivas? | Columna de Arturo Mena “Nefrox”
TESTEANDO
En el Clausura 2025, el Club Deportivo Guadalajara ha mostrado un desempeño irregular: 4 victorias, 3 empates y 4 derrotas en 11 partidos, lo que les da un total de 15 puntos y los coloca en el décimo lugar de la tabla. Este resultado es preocupante, considerando las expectativas que siempre rodean a uno de los clubes más emblemáticos del fútbol mexicano.
Apenas este fin de semana, empataron sin goles contra el América, un resultado que, aunque no fue derrota, refleja la falta de efectividad en el ataque. Pero si hablamos de algo que puede preocupar, es sin duda la goleada que el mismo América le propinó por la Concacaf.
Bajo el liderazgo de Gerardo Espinoza, el equipo busca encontrar su ritmo. Sin embargo, las estadísticas actuales indican que Chivas ha anotado solo 13 goles en 11 partidos, mientras que ha recibido 14, lo que muestra un déficit en su diferencia de goles. Esta falta de potencia ofensiva es un problema crónico que ha afectado al equipo durante varias temporadas.
La defensa, aunque no ha sido desastrosa, tampoco ha sido lo suficientemente sólida como para compensar las carencias del ataque. La llegada de Espinoza como entrenador fue vista como una oportunidad para cambiar la dinámica del equipo. Con experiencia previa en clubes como Atlas y Tapatío, así como su trabajo con la Selección Mexicana Sub-23, Espinoza tiene las herramientas para guiar a las Chivas hacia un futuro más prometedor, o eso se piensa.
Sin embargo, hasta ahora, los resultados no han sido los esperados. La clave para su éxito radica en mejorar su capacidad ofensiva y encontrar consistencia en sus actuaciones. En el mercado de fichajes, las Chivas han hecho movimientos para fortalecer su plantilla, pero es evidente que todavía falta trabajo por hacer.
La falta de un delantero goleador y la inestabilidad en el mediocampo son algunos de los puntos débiles que deben ser abordados. Además, la presión sobre los jugadores para rendir al máximo es alta, especialmente en un club con la historia y la pasión que rodea a las Chivas.
En cuanto a las perspectivas para el resto del torneo, es difícil predecir un final brillante para las Chivas con su actual rendimiento. Aunque todavía hay tiempo para mejorar, parece improbable que puedan alcanzar algo que valga la pena para lo que sus seguidores esperan.
Un pronóstico realista podría situarlas en un lugar entre el séptimo y el noveno al final del Clausura 2025, siempre y cuando logren mejorar su consistencia y evitar derrotas importantes en los próximos partidos. Con ello, el play-in parece alcanzable, pero no superable.
En fin, las Chivas están en un proceso de transformación que ya duró muchos años. No olvidemos que apenas en el Apertura 2023, Guadalajara fue finalista del torneo, pero necesitan urgentemente mejorar su rendimiento para aspirar a metas más altas en el fútbol mexicano.
La paciencia de los aficionados se está agotando, y es crucial que el equipo muestre señales de mejora en los próximos partidos. La llegada de Espinoza es una oportunidad para redefinir el rumbo del equipo, pero hasta ahora, los resultados no han sido lo suficientemente convincentes como para generar optimismo entre los seguidores, y muchos seguimos preguntándonos: ¿y las Chivas?
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#4 Tiempos
Hace 70 años se gestaba la Facultad de Ciencias de la UASLP | Columna de J.R. Martínez/Dr. Flash
EL CRONOPIO
La Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí cumplió, el pasado 5 de marzo, 69 años de haber sido fundada. Con ello se abría por primera vez en provincia una facultad orientada a la formación de investigadores científicos y con ello daba inicio la actividad de investigación en la propia Universidad Autónoma de San Luis Potosí; su apertura fue orientada a la física, convirtiéndose la carrera de física en la tercera carrera creada en el país, después de la UNAM y de la Universidad Autónoma de Puebla, pero la primera carrera de física en provincia que formaba físicos que se dedicaran a la investigación científica. Su gestación se desarrollaba hace setenta años.
Los antecedentes inmediatos previos a la fundación de la Facultad de Ciencias no han sido tratados en plenitud. Existen acontecimientos y actividades, un tanto olvidados, que fueron hilvanando la creación del Departamento de Física, del inicio de la carrera de física y de la maestría en física, lo que derivó años después en la Facultad de Ciencias y del Instituto de Física de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
En la actualidad la Universidad Autónoma de San Luis Potosí es una de las instituciones de educación superior más importantes del país y una de las mejor posicionadas en cuanto a la investigación científica. Estas bases académicas se plantearon en la década de los cincuenta con el proyecto de creación de la Facultad de Humanidades y Ciencias y, que luego de un desarrollo irregular logró consolidarse al finalizar el siglo XX y en los albores de este siglo XXI. La raíz de la investigación científica en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí se configuró en el proyecto inicial de crear una Facultad de Humanidades y Ciencias, con la estructura de departamentos en varias áreas del conocimiento donde pudiera realizarse investigación y difundirse la cultura superior; entre los departamentos que comenzaron a configurarse se encontraban el de filosofía, antropología, historia, arqueología, letras, biología y física, con la presencia de un par de institutos orientados a la investigación, el Instituto del Desierto, que luego se convertiría en Instituto de Investigación en Zonas Desérticas, y el Instituto de Física, que comenzaron a funcionar, en la práctica, en 1955.
La creación del Departamento de Física, a finales de 1955 y, que iniciara actividades docentes el 5 de marzo de 1956, inauguraba las actividades de investigación y de estudios de posgrado y daría vida a la entonces Escuela de Física, hoy Facultad de Ciencias y del Instituto de Física; los protagonistas de esta aventura, además de Gustavo del Castillo y Gama y Candelario Pérez Rosales serían los miembros de la Academia Potosina de Ciencias y Artes, con el empuje de Ramón Alcorta Guerrero y, principalmente el Dr. Manuel Nava Martínez que tuvo la visión de sentar las bases de la actual Universidad Autónoma de San Luis Potosí cuyo desarrollo se vio un tanto interrumpido con su prematura muerte.
Los acontecimientos mencionados son registrados en el libro “Orígenes de la Facultad de Ciencias de la UASLP”, de los autores Luis Guillermo Martínez Gutiérrez y Dr. Flash, donde abordamos esos aspectos no tratados hasta el momento sobre los antecedentes inmediatos de la creación de la Facultad de Ciencias, completando de esta forma esa historia de nuestras instituciones. Libro que conmemora los setenta años de la gestación de la Facultad de Ciencias.
Como un homenaje a los personajes que a lo largo de setenta años han construido esta importante institución, hemos escrito un libro que recoge aspectos desconocidos sobre los orígenes de la Facultad de Ciencias. El libro puede conseguirse directamente con el autor a la dirección de correo: [email protected], y tiene un costo de doscientos pesos.
El libro está dedicado a la memoria del Dr. Manuel Nava Martínez, uno de los artífices de la creación de la Facultad de Ciencias e impulsor del inicio de la investigación científica en la UASLP, con su intenso programa académico que instauró en la UASLP en la década de los cincuenta. Manuel Nava Martínez humanista impulsor de la autonomía universitaria.
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#4 Tiempos
#8M | ¿Y tú… por qué marchas? | Columna de Ana G. Silva
CORREDOR HUMANITARIO
La marcha del 8 de marzo es mucho más que una manifestación pública; es un reflejo de las realidades más profundas y dolorosas que viven muchas mujeres. Lo que comenzó como una lucha por los derechos de género se ha convertido en un espacio donde se alzan las voces de aquellas que no tienen más forma de ser escuchadas.
Desde el año anterior, me he dado a la tarea de realizar breves entrevistas a aquellas que asisten a estas marchas en San Luis Potosí, un testimonio breve… les pregunto: ¿Por qué marchan?
El testimonio que me dejó paralizada fue el de una joven que me respondió: “porque era una niña”. Vemos cómo la violencia y la vulnerabilidad atraviesan la vida de muchas desde edades tempranas. Esta respuesta, aparentemente simple, encapsula un dolor tan profundo que se transmite más allá de las palabras.
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Cada historia compartida durante la marcha es un testimonio de resistencia, un recordatorio de lo que muchas han tenido que soportar y siguen soportando.
Otro fue el caso de Katia, quien sufrió una mutilación del labio inferior y aún vive con el miedo de que su agresor no reciba el castigo que merece, muestra lo insuficiente que es la justicia en muchos casos. A pesar de las heridas visibles, las cicatrices invisibles del miedo y la angustia son las que realmente persisten.
Es doloroso ver cómo, incluso cuando se reconstruye lo físico, el sistema parece no reconocer la magnitud del daño emocional y psicológico que estas mujeres enfrentan.
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Lo más inquietante de todo esto es que las marchas del 8M no son solo un reflejo de la lucha actual, sino una forma de recordar a todas las mujeres que, como la joven que marchaba en memoria de su niñez, o como Katia, siguen luchando por su derecho a vivir sin miedo. Vivir en un mundo donde no se les vea como cifras, donde no se les minimice o se les reste valor por su sufrimiento.
Estas marchas son el grito de todas las mujeres que no quieren que otra más sea víctima de violencia.
Reflexionar sobre estos testimonios y las experiencias de las mujeres que marcharon nos obliga a mirar más allá de lo superficial, ya que las pintas y quemas en los edificios del Centro Histórico son solo la manifestación visible de una lucha mucho más profunda: una lucha por la seguridad, la justicia y el respeto.
La marcha del 8 de marzo también es un homenaje a las vidas de mujeres como Karla Pontigo, Odalys Hipolito, Lupita Viramontes y Fernanda Morán, que fueron víctimas de feminicidio, sus familias siguen luchando en su nombre, marchando para que su memoria no sea olvidada y para que su muerte no quede impune, y no se trata solo de pedir justicia para ellas, sino de exigir que se frenen más feminicidios.
Sororidad a las compañeras reporteras
Es importante subrayar que, aunque la marcha del 8M es un espacio de protesta, debe mantenerse el respeto mutuo entre todos los participantes, incluidos los periodistas que cumplen con la labor de informar.
Repruebo completamente los ataques sufridos a las compañeras reporteras en San Luis Potosí. Estos actos de violencia son inaceptables y no tienen cabida en una lucha que debería unirnos en la búsqueda de la justicia, la igualdad y la dignidad para todas las mujeres.
Los periodistas tienen la libertad de cubrir lo que deseen en un evento público. Al final, su labor es documentar, es dar cuenta de lo que sucede, y lo hacen para que la sociedad pueda conocer todas las dimensiones de una lucha que involucra diversas formas de manifestarse.
El trabajo de los medios de comunicación es esencial para visibilizar las problemáticas que enfrentan las mujeres, y esto no debe ser entendido como un acto de oposición, sino como un apoyo a la causa.
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